martes, 25 de agosto de 2009


Grito fuerte como para que me puedan escuchar.
Grito de felicidad porque hoy al mal le he podido ganar.

Amor de niña

Fue muy inocente al amarlo tan profundamente.
Creyó en sus falsas palabras, en sus cautivantes miradas.
Cerró sus ojos ante él y se ahogó en su alma.
No dudó, se encegueció. No vio que ante ella el mal se encontraba.
Por su amor y por su desesperación fue cautivada.
Su insistencia, su perseverancia, su arrogancia la embaucaban.
Y ella lo siguió. Tanto que se perdió. Tanto que sufrió.
Después de todo lo que pasó, él la hirió. No le importó.
Borró sus años de amor, borró su historia
y los mejores recuerdos que guardaba su corazón.
Se acabó, con su amor de niña él terminó.
El que me daba orgullo tristemente ha muerto.
Ahora solo ha quedado ese que me provoca desprecio.
He crecido. He cambiado. He madurado.
De tanto dolor, he aprendido algo.

En la profundidad se abren las penas que alguna vez se habían cerrado.
Es ahí donde todo huele a podrido y donde la oscuridad te mantiene atrapado.
Liberame del sol que me quema la mirada,
liberame de ti, que mi corazón se apaga.
Liberame de todo lo que quema mi alma,
liberame de tu desgracia que mi corazón desangra.

viernes, 14 de agosto de 2009

No cambies de rumbo
si a lo lejos, aún no ves un nuevo camino.

Dejame entrar...




























Golpearé a tu puerta cuando estés dormido, cuando te halles perdido.
Acabaré insinuando cuál será tu verdadero destino.
Pensarás como evitarme, intentaré no dejarte.
Alucinaré tu sangre, probarás de mi hasta encontrarme.
Buscaré tu cuerpo, oleré tu alma, succionaré tu deseo.
Déjame entrar, acabaré robando tu miedo de ser eterno.
Morderé de ti, beberé de mi.
No te dejaré salir, hasta que te hayas encontrado en mi.

Si mi amor te ha abandonado
fue por el dolor que a mi corazón le has causado.

Soy fuente de inspiración
para quien ha perdido su huella,
para quien ha perdido su camino.
Soy fuente de dolor,
para quien ha perdido todo
por haberme herido.


lunes, 10 de agosto de 2009

Piérdete conmigo, sin importar el camino.
Llévame a donde quieras, no importa el destino.
Déjate llevar lejos, déjate llevar conmigo.
El lugar a donde vayamos siempre será divino.
Cambia, todo cambia. El aire se convierte en pena y la luz en sombra.
La vida se vuelve aterradora y el amor se transforma siempre en otra cosa.
Una y otra vez, los mundos se encuentran y entre falsas huellas puede que alguna vez se pierdan. La voz se oye como un grito y el grito llora por dañino.
Nada es lo que parece, nada es lo que se siente, cuando el tiempo se ha perdido y el amor se ha destruído.
Roba de mi sangre lo que alguna vez has sentido.
Pierde la razón y muerde de mí, hasta que me hayas querido.
Gritaba asustada, por la calle no se oía nada. Un silencio aterrador, la obligó a pedir perdón.
Estaba sola y desalmada. Había perdido el color que la iluminaba. Ya estaba opaca, abandonada. Todos la miraban por su cara de asombrada, y espantada, olía a temor. Había llegado de lejos perdiendo el control. No escapaba, sólo buscaba un alma que la ayudara. Estaba anonadada, no esperaba lo que pasaba. No esperaba nada. Estaba angustiada, ya se sentía alejada de haber sido amada. Impactaba, su sorpresiva angustia, impactaba.
De desesperación al suelo se aferraba, gritaba, no perdonaba. Aclamaba por su alma, sólo se desahogaba. Aullaba, sacaba su pena del alma, gritaba. Todos la miraban. La observaban. Ella seguía angustiada. No paraba. Nada la calmaba.
Era lógico, ya nadie la deseaba.
Si el mundo está perdido, yo voy a encontrarlo...
Quiero perderme pensando, en vez de morirme ignorando.

miércoles, 5 de agosto de 2009


Hoy es noche de luna llena
que suerte tengo que el lobo al fin se ha perdido.