martes, 28 de julio de 2009

Siento pena por las almas perdidas, esas que no pueden amar
y que pierden todo buscando su propio ego.
Esas que lastiman sin pena para llegar a una gloria ficticia.
Me dan pena, sufro por ellas.

Pierden sus almas, quedan vacíos y viven una vida de mentira.
Caminan y caminan sin rumbo, perdidos, vacíos.
Solos, muy solos, así se quedan. Solos, muy solos, la vida los deja.

Pierden el tiempo pensando en nada, dejan pasar la vida, dejan olvidada su alma.
Es una pena.

2 comentarios:

  1. Me encantó Fedra! me llega muy hondo y te entiendo. Hay muchos que prefieren el vacío de sus vidas armadas, sin amor, sin peligro de descontrol, en una perfección de vacío...y pierden su tiempo o llenan sus horas pensando en un futuro, no viviendo el presente. Dejando morir lo que está vivo. Bravo amiga!!!!

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  2. muy cerebral pero el corazon,no critiques pues nos criticamos a nos

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